Se acerca el verano y el periódico El País ha publicado un interesante artículo sobre los sistemas de aire acondicionado, que suelen encarecer la factura eléctrica del consumidor. De todos modos, con unas sencillas pautas conseguiremos reducir de forma significativa la factura.
- Si no dispone aire acondicionado o puede permitirse cambiar de aparato, opte por uno de los últimos modelos, que ahorran hasta un 80% en electricidad.
- Elija aparatos con calificación energética A++, ya que tienen un consumo entre un 35% y un 40% menos que uno A.
- Opte por equipos con tecnología inverter, que ahorran entre un 30% a un 50% de energía, consiguen una mejor sensación térmica y reducen el nivel sonoro.
- Déjese aconsejar por un profesional y adquiera un equipo que se corresponda con las necesidades de su hogar (metros cuadrados, horas de luz, orientación, etc.).
- Fije la temperatura en 25º en verano. Tenga en cuenta que un grado extra supone un aumento del 8% en el consumo.
LAS PRESTACIONES MÁS NOVEDOSAS
Cada año aparecen aires acondicionados que incorporan nuevas funcionalidades. Las más recientes están relacionadas con una mejor tecnología de filtraje, más eficiente a la hora de atrapar partículas de polvo microscópicas, virus, bacterias y olores. Otras de las nuevas prestaciones son el “modo nocturno”, que permite ahorrar energía al evitar el sobrecalentamiento o el exceso de frio en el ambiente, o programas que se adaptan al número de ocupantes en cada momento.
RESPUESTAS A LA PRINCIPALES DUDAS
- ¿Sabe realmente cual es la repercusión del aire acondicionado en su factura de la luz?
- ¿Es conveniente realizar una inversión para sustituir los equipos de aire acondicionado por otros más modernos de menor consumo?
- ¿Cómo influye la temperatura a la que programo el aire acondicionado en el consumo eléctrico?
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Foto: Aire acondicinado de la firma Samsung.
